Con un disco superventas y una gira de éxito junto a su banda, Black Eyed Peas, un marido y un perfume a su nombre, Fergie se encuentra en un momento álgido profesional y personal. Sin embargo, su vida no ha sido siempre tan sencilla. Hace unos años, la cantante libró una dura batalla contra su adicción a la metanfetamina, una de las sustancias ilegales más adictivas, sobre la que ha hablado en una reciente entrevista.Al recordar este periodo, la artista mantiene una posición ambivalente, confesando que sus días de excesos tuvieron ventajas e inconvenientes a partes iguales: "Creo que la droga puede llevarte, en ocasiones, a momentos muy brillantes, y en otras te conduce al desastre. Esa es mi respuesta."
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