
Todos los colores del arco iris estaban plasmados en la indumentaria que Rihanna lució en el estadio 'O2 Arena' de la capital del Reino Unido. La cantante de 'Umbrella' dejó con la boca abierta a los presentes, que no esperaban ver, ni su corta melena rubia, ni más centímetros de carne de los previsibles. Rihanna lució, durante la mayor parte del espectáculo, una colorida braga tipo 'abuela', combianada con un minúsculo sujetador. Todo a juego. Para el calzado, la natural de Barbados se decantó por unos botines rosa fucsia con punta naranja. Todo un atrevimiento, palabra desconocida para Rihanna.
Rihanna hizo las delicias de los presentes, combinando temas clásicos como 'Umbrella' o 'Don´t Stop the Music', con sus nuevos sencillos 'We found love' y 'Rude boy'.
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