Lily Allen temió acabar muerta como Amy Winehouse

Tras recorrer las emisoras de medio mundo con éxitos como Not fair o Fuck you, su nombre pasó a la retaguardia musical a la vez que saltaba a las primeras páginas de la prensa sensacionalista, que recreó con regocijo sus dispendios, sus adicciones confesas, un vergonzoso encontronazo con Elton John o detalles sobre su vida personal.

Ahora, Lily Allen ha confesado al diario The Sun que durante un tiempo temió terminar como lo ha hecho Amy Winehouse.

"Salí algunas noches con Amy (...). Es tan fácil quedar atrapado en esa locura. He sido suficientemente fuerte para salir de eso", ha explicado.

La cantautora también ha revelado que recibió varios SMS de sus amigos cuando se supo que Winehouse había fallecido: "Estaban felices de que yo siguiera ahí, que no hubiera muerto también".

Tal y como le ocurrió a su compañera de correrías, Allen atravesó una etapa complicada tras alcanzar el éxito a finales de la década anterior y ser señalada por varios críticos como una de las artistas más importantes de 2009.

A partir de esa fecha en la que publicó su segundo álbum, It's not me, it's you, su prometido tercer disco nunca terminaría de llegar. Por el medio, Allen protagonizó algunas cancelaciones de conciertos (en España no acudió a ninguna de sus dos citas en el festival de Benicassim en 2009 y 2010), escándalos, publicitadas borracheras, leyendas y, en 2010, un anuncio de su retirada de la música para trabajar en proyectos de moda.

Ahora su voz se ha vuelto a oír gracias al rapero T-Pain, que ha remezclado su tema Who'd Have Known. En cuanto a la posibilidad de su retorno a la música, este podría ocurrir "en un futuro" con un nuevo álbum en clave de country, según desveló el pasado mes de julio a la cadena BBC. Sin embargo Hoy por hoy la artista, que se encuentra embarazada, tiene "otras prioridades".

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